Utiliza Clorhidrato de Amotosaleno, el que penetra dentro de los virus, bacterias, parásitos, leucocitos y se une al ADN y ARN. Luego que se acopla el Amotosaleno es activado por luz ultravioleta formando un enlace químico (aducto) que bloquea su replicación. Los patógenos son inactivados por el proceso y no pueden multiplicarse y causar enfermedad.